Pese a que Charles Xavier fuera una de las víctimas mortales
del gran crossover ‘Vengadores vs Patrulla-X’, Cíclope también fue una víctima
lateral de todo el movimiento orquestado por la plana mayor de La Casa de las
Ideas ya que de ser un carismático líder en su máximo apogeo, pasó a
convertirse en un proscrito para la ley y un paria para los suyos en una nueva
situación de la que parece que Bendis aún tiene mucho que decir.
Y es que al igual que en su día el Capitán América en ‘Civil
War’ o Norman Osborn en ‘Reinado Oscuro’ al escritor siempre le ha gustado
mantenerse en los márgenes morales que mueven el motor de los grupos en los que
recala. Ya que tal y como nos ha venido demostrando el mundo, ni todo es tan
blanco ni todo es tan negro y que la escala de colores es mayor aún de lo que
nos pensamos cuando el mundo es en gris.
Con el movimiento de trasladar el quinteto original del
pasado a nuestros días presentes muchos pensaban que el autor de esta manera se
lavaría las manos para tratar con la continuidad, pero nada más lejos de la
realidad, y es que el autor sabe jugar muy bien las cartas que le supone tener
un contexto tan caótico pero tan bien definido que le permite contrastar las
aventuras de los jóvenes alevines con la que nos anda ofreciendo en La
Imposible Patrulla-X cuya máxima línea argumental, sin duda alguna, pasa a ser
el camino de redención iniciado por Cíclope tras los eventos acaecidos y que
hicieron caerle en desgracia, a la vez que poco a poco va ganándose el favor de
los lectores y los suyos al ver que la lucha del líder por antonomasia de la
Patrulla-X sigue en pleno fragor.
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